Mi primer intento de afeitarme con la nueva maquinilla de afeitar sostenible SHAVENT
Durante muchos años había utilizado diferentes maquinillas de afeitar, siempre comprando y probando nuevos modelos. Sobre todo, por supuesto, como muchos de nosotros, las maquinillas de afeitar especiales “para mujeres”. Más recientemente tuve uno “normal” para hombres y pensé que afeitaba mucho mejor.
Pero a medida que pasó el tiempo, lo que me molestó no fue solo la cantidad de desechos plásticos que se generaban al comprar constantemente cabezales de repuesto, ¡sino también la cantidad de dinero gastado en ello!
Por eso me encantó inmediatamente la idea de Armin de construir un modelo similar con una cabeza móvil y tres cuchillas, ¡pero hecho completamente de metal! Entonces se acabarán por fin todos los residuos de plástico procedentes de los cabezales intercambiables y sus embalajes.
Cuando el primer prototipo estuvo listo y Armin ya había dominado los primeros intentos en su cara sin ningún daño, ¡por supuesto quise probarlo de inmediato, en sus piernas!
Así que moja tus piernas en la ducha como de costumbre y ponles un poco de gel de ducha.
Ahora tomé la nueva navaja, a la que tenía un gran respeto, porque las hojas de afeitar son muy afiladas y me preocupaba lastimarme. Muy lentamente y con mucho cuidado apliqué la nueva navaja y dibujé un trazo de abajo hacia arriba a lo largo de mi pantorrilla.
¡Nada! No sentí nada. Ni rasguños, ni ruidos al afeitarse, nada.
No funciona en absoluto, pensé. Sin embargo, seguí intentándolo. Cuando la ida estuvo completamente curada, pasé la mano por la piel. ¡¡¡¡INCREÍBLE!!!!
¡Tan suave! ¡Cómo es posible! ¡No había notado nada sobre el afeitado ni sobre las cuchillas afiladas! Inmediatamente probé la navaja en mis axilas y obtuve el mismo resultado. ¡Qué placer, este será mi nuevo afeitado!
Todavía hoy tengo esta sensación después de cada afeitado con SHAVENT y, a menudo, tengo que sonreír ante las primeras experiencias. Desde ese día no he vuelto a utilizar mi antiguo sistema de afeitado porque este modelo nunca me dio un resultado de afeitado tan suave. De lo contrario no habría notado tanta diferencia.
Inicialmente hubo exactamente dos lesiones, una en el tobillo y otra en la rodilla. Para ser honesto, esto fue mi culpa. Hay que utilizar la navaja con cuidado y no simplemente “cortarla”. Hay que tener cuidado con las espinillas, los tobillos y las rodillas, como con cualquier otra navaja.
En caso contrario, el SHAVENT afeita muy suavemente y en profundidad. Si esta sensación desaparece, es hora de cambiar la cuchilla. Para mí después de unas 4 semanas.
Conclusión:
¡El SHAVENT es ideal para unas piernas suaves!
También afeita todas las demás partes del cuerpo con la misma suavidad y suavidad. Por supuesto, los hombres también pueden utilizarlo porque es igual de suave y cuidadoso para la cara y la cabeza.
No hay más residuos de plástico ni más cabezales intercambiables costosos que seguir comprando.
Cambiar la cuchilla es un poco más complejo que simplemente sacar el cabezal de repuesto con un clic y poner el nuevo con un clic. Pero con un poco de práctica es poca cosa. Un paquete de cuchillas me dura fácilmente entre dos y tres años y sólo cuesta unos pocos euros.
¿Y cuándo lo vas a probar?
